miércoles, 30 de julio de 2014

Arqueólogos descubren personaje de élite con atuendos felinos en Perú



El personaje pertenecía a los Moche, una de las principales culturas preincaicas, y tenía unas garras de felino fabricadas con piezas de cobre.

Arquéologos peruanos descubrieron una tumba con los restos de un personaje de élite que vivió hace 1500 años y que pertenecía a la cultura Moche, con un ajuar de atuendos felinos y un cetro de cobre en la Huaca de la Luna, dedicada a los sacrificios humanos.

El director del proyecto arqueológico Huaca del Sol y de la Luna, Ricardo Morales, explicó que este hallazgo “es el primero que tiene estos elementos totalmente nuevos”, entre lo descubierto en la zona en los últimos 23 años.

La Huaca de la Luna está en un complejo arqueológico en la ciudad de Trujillo, en la costa norte de Perú, y fue “un templo dedicado totalmente al sacrificio humano, como ofrenda a la deidad de las montañas”, indicó Morales.

Los sacrificios estaban relacionados con la agricultura, el culto a la tierra y al agua, y la fertilidad, añadió.

Los moche se desarrollaron en una amplia zona desértica del norte de Perú, que tiene valles irrigados por ríos que provienen de la sierra y desembocan en el océano Pacífico.


En la zona urbana del templo, los arqueólogos peruanos encontraron una tumba, de unos 1500 años de antigüedad, de un personaje de élite que tenía entre su ajuar funerario un cetro de cobre parecido al del Señor de Sipán, el gobernante Moche, una de las culturas pre-Incas que se establecieron en el actual territorio peruano. “La diferencia es que éste es de cobre y el del Señor Moche es de oro, lo que marca el nivel de jerarquía”, dijo el investigador Santiago Uceda, jefe de los arqueólogos del equipo investigador.

El especialista indicó que también “se encontró un atuendo impresionante hecho de piel de felino, dos orejeras, un vaso ceremonial, láminas de metal y unas garras de cobre con uñas del mismo metal”.

“El cetro debe haber funcionado en el ceremonial como el fondo musical, y tiene iconografías de diversos personajes, como el dios búho”, señala Morales.


“El felino es una de las deidades principales de los moche, por eso la deidad de la montaña siempre está representada como el felino, de donde bajan los ríos, en forma de serpientes, para regar las áreas desérticas de la costa”, explica el especialista.


Morales dijo que esos elementos dejan entrever que este personaje debió ser alguien importante (un sacerdote, un guerrero o un gobernante), y ahora se trata de definir cuál fue su nivel de jerarquía en el mundo moche, una de las principales culturas preincaicas.

Durante las investigaciones realizadas por el equipo desde el pasado mes de abril también se han encontrado dos murales en “muy mal estado de conservación”, pero que permiten determinar cómo fue el sistema de conexión entre un espacio ceremonial grande y otros más pequeños al interior del templo.


En uno de los murales se observa a dos personajes tomados de la mano y en el otro, al dios de la montaña, una de las principales divinidades moches.

Los restos humanos encontrados en la tumba, así como el cetro, las garras y colmillos, cerámicas, orejeras de metal y una máscara serán analizadas en los próximos meses por el equipo de arqueólogos del proyecto en los laboratorios que tienen en el complejo.

Morales dijo que, por el momento, no pueden ser expuestos al público y que los estudios permitirán comparar los elementos con otros ajuares funerarios de la zona para tener conclusiones más certeras sobre su origen y funciones en la sociedad moche.

Fuente: EFE - AFP. 14 de Julio de 2014.