viernes, 7 de mayo de 2010

Descubren en Isla de Pascua una de las mayores cavernas del mundo

Los moais de Rapa Nui.


Santiago.- Un equipo internacional de investigadores, dirigido por el espeleólogo español Jabier Les, descubrieron en la chilena Isla de Pascua una de las cavernas más extensas del mundo, informaron hoy fuentes del proyecto.

Durante cinco años el equipo exploró los secretos de las galerías subterráneas de Isla de Pascua documentando más de 7000 metros de galerías que se esconden bajo el suelo de Rapa Nui.

En un sector conocido como Roiho, los espeleólogos cartografiaron, empleando modernas tecnologías, más de seis kilómetros de galerías subterráneas en lava, uno de los sistemas de cuevas más grandes del planeta.

En sus apenas 165 kilómetros cuadrados de extensión, la isla cuenta con tres sistemas volcánicos que han originado un impresionante laberinto subterráneo, formado por miles de tubos volcánicos que derivan en alrededor de mil cavidades, la mayoría de las cuales hasta ahora nunca habían sido exploradas.

Todavía quedan extensas zonas por investigar, por lo que es posible que en un futuro Roiho consolide su carácter único, transformándose en un nuevo patrimonio universal.

En las cuatro expediciones dirigidas por el Jabier Les, que pertenece a la “Sociedad de Ciencias Espeleológicas Alfonso Antxia” del País Vasco (norte de España), se descubrieron además varias especies de invertebrados desconocidos hasta ahora para la ciencia.

Asimismo, los investigadores realizaron importantes descubrimientos en el campo de la arqueología, como el hallazgo de petroglifos y pictografías en cuevas de los primeros pobladores de este “ombligo del mundo”.

El resultado de las exploraciones será exhibido el próximo domingo en el programa “Cazadores de Ciencia”, de TVN.

Fuente: EFE. 05 de Mayo de 2010.

Encuentran en Florida el grabado más antiguo de América

Reconstrucción de un mastodonte.


Fósil con tallado de un mastodonte podría ser anterior en miles de años a Stonehenge y a las pirámides de Egipto.

Un fósil con un pequeño dibujo de un mastodonte, hallado en el estado de Florida, Estados Unidos, y grabado hace unos 13.000 años, puede ser la pieza de arte más antigua conocida del continente americano.

Según informó hoy el periódico Miami Herald, un equipo de científicos de la Universidad de Florida cree que la pequeña talla en el fragmento de hueso es auténtica, ya que las pruebas realizadas hasta ahora no indicaron indicios de falsificación.

De ser auténtica, la talla podría ser anterior en miles de años a Stonehenge, el círculo de grandes bloques de piedra más famoso del Neolítico, en Inglaterra, y a las pirámides de Egipto.

Además "ofrecería evidencia de que Florida estuvo habitada por seres humanos durante la última Edad de Hielo, junto a mamíferos ahora extinguidos, como el mastodonte, el mamut y el tigre de dientes de sable", apuntó el Miami Herald.

La obra de arte pertenece a James Kennedy, de 39 años, un coleccionista aficionado de fósiles que planea venderlo en una subasta, en lugar de donarlo a un museo.

Kennedy reveló haber encontrado la pieza cerca del sitio arqueológico "Vero Man", en Vero Beach, al sur del aeropuerto de la ciudad.

Fuente: ANSA. 10 de Abril de 2010.

Científicos descifrarán la verdadera historia de los chono

Descendientes de los chonos, en el sur de Chile.


De los tres pueblos canoeros que poblaron el extremo sur, fueron los primeros en extinguirse. Expertos buscarán descifrar sus secretos a través de su DNA para saber si se trataba de un grupo étnico diferenciado, distinto al kawésqar y yámana o si fueron el resultado de una expansión tardía de los huilliches de Chiloé.

“La jente que hai en esta ensenada susodicha, son indios pescadores de mediano cuerpo i mal proporcionados. No tienen sementeras; mantiénense de pescado, i marisco, i lobos marinos que matan; i comen la carne de los lobos y pescado crudo, o aves cuando las matan, i otras veces las asan. No tienen ollas, ni otras vasijas; ni se ha hallado sal entre ellos. Son mui salvajes i sin razón. Andan vestidos de los cueros de los lobos i de otros animales, con que se cubren las espaldas, y caen hasta las rodillas, i una correa que les atan por el pescuezo… Traen sus vergüenzas de fuera sin ninguna cobertura. Son de grandes fuerzas”. Así describía Juan Ladrillero, un español que llegó a Chile junto con García Hurtado de Mendoza, al pueblo chono.

Se sabe que este pueblo habitó las costas sureñas de nuestro país en la época prehispánica y que tal como lo señaló Ladrillero, vivían de la pesca, recolección de moluscos y la caza de lobos marinos. Pero eso es sólo una descripción general porque hay muchos antecedentes que aún se desconocen. De hecho, existen algunos historiadores que señalan que en realidad estos nómades no constituyeron un pueblo como tal sino que serían el resultado de una expansión tardía de las poblaciones agroalfareras huilliches de Chiloé sobre las poblaciones kawésqar.

Por lo mismo, un equipo multidisciplinario de científicos de la Universidad de Chile analizarán el DNA mitocondrial y reevaluarán la data antropológica de sus restos para determinar si fueron una entidad poblacional específica o el resultado de la expansión territorial huilliche.

La investigación -“Estudio de DNA mitocondrial de los habitantes del extremo septentrional de los canales patagónicos: Una aproximación al mundo chono desde la antropología molecular y la reevaluación de la data antropológica y arqueológica”- es financiada por Fondecyt y participan expertos de antropología física y genética de la casa de Bello.

El académico del Programa de Genética Humana del Instituto de Ciencias Biomédicas de la U. de Chile, doctor Mauricio Moraga, explicó que de las tres poblaciones de nómades del mar que describen los cronistas (chono, kawésqar y yámana), “éstos son los primeros en desaparecer y a juicio de los antropólogos que los han estudiado presentan una serie de problemas nutricionales y enfermedades que hacen pensar en una población altamente estresada. Una de las hipótesis es por el avance de las poblaciones agroalfareras de Chiloé sobre los canoeros de la región”.

El especialista analizará la genética de esta población utilizando el material óseo almacenado en la Facultad de Ciencias Sociales de la U. de Chile y en el Instituto de la Patagonia y el Museo Antropológico Martín Gusinde.

“Sobre los chono se sabe poco ya que habitaron una zona muy compleja en términos geográficos y su desarrollo cultural no dejó, como otros grupos prehispánicos, cerámicas o productos textiles que sirvieran como fuente de información. Más bien sus costumbres se conocen por las descripciones subjetivas que hicieron cronistas de la época, antes de que se extinguieran hacia fines del siglo XVIII”, explica Moraga.

Investigación

Durante la investigación, los antropólogos físicos encabezados por el académico de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, Eugenio Aspillaga, aplicarán técnicas modernas de antropometría y morfometría geométrica y así determinar estatura, estado nutricional, morfología craneana y enfermedades de este grupo.

“Explicaremos si hubo o no mestizajes y los cambios en el patrón de morbilidad que explique la extinción. Hay descripciones generales respecto de su salud. Darwin, por ejemplo, hace referencia a problemas de tipo vasculares en las piernas, lesiones varicosas que atribuyó a los cambios bruscos de temperatura porque pasaban del calor de la fogata a bucear en agua fría y las bajas temperaturas del medio ambiente también”, dijo Aspillaga.

También se sabe que tienen alteraciones dentales que dan cuenta del consumo de mariscos y productos del mar principalmente. En sus esqueletos también existen indicadores que demuestran la importancia del uso de las embarcaciones en sus vidas, señaló el antropólogo.

Moraga por su parte, extraerá y amplificará DNA mitocondrial de los huesos (que informa sobre el linaje materno) para conocer las posibles vinculaciones entre los chono y las poblaciones instaladas al norte del archipiélago que lleva su nombre, donde se ubican los huilliches de Chiloé, y quienes están al sur de este conjunto de islas, donde históricamente se ubicaron los kawésqar.

Los primeros resultados del análisis de DNA se podrían conocer recién a mediados del próximo año. “Primero tenemos que reanalizar los restos con las herramientas clásicas de la antropología física y aumentar los fechados radiocarbónicos, para decidir cuáles materiales incluimos en el estudio molecular. Esa parte estará a cargo de uno de los coinvestigadores del proyecto, el profesor Eugenio Aspillaga. Probablemente los primeros resultados para DNA mitocondrial los tengamos en junio o julio de este año, pero para poder contestar las preguntas respecto a la identidad genética de los chono necesitamos tener información para un número elevado de individuos. Muy probablemente a mediados del 2011 tengamos una primera visión de la estructura genética de esta etnia extinta”, dijo Moraga.

Para desarrollar su investigación, los científicos también harán trabajo en terreno en los canales del sur del país.

Trabajo en terreno

El proyecto también contempla una excavación arqueológica en la isla Traiguén. La idea es encontrar una relación entre las osamentas y el contexto ambiental en el que habitaron los chono, para conocer con más certeza la estructura de su población y promover la identidad cultural de los descendientes de los pueblos nómades canoeros mediante un soporte biológico.

“Muchos de estos grupos siguen desplazándose en los canales del sur y producto de la ocurrencia de flujo génico con inmigrantes recientes van perdiendo sus características fenotípicas así como su identidad cultural. De ahí que sea tan importante el trabajo mancomunado a nivel molecular, arqueológico y antropológico”, dijo Moraga.

Según él, se sabe que en esta isla hay presencia de conchales y restos de entierros humanos de este pueblo. “La isla es parte de un programa de prospección que pretende identificar ocupaciones culturales e inhumaciones indígenas con el fin de conocer más de la forma de vida y las prácticas culturales de los grupos de cazadores recolectores marinos”.

El equipo que realizará el trabajo en terreno está formado por especialistas en bioantropología, fauna y lítica a cargo del otro coinvestigador del proyecto, el arqueólogo Omar Reyes, investigador adjunto del Instituto de la Patagonia de la Universidad de Magallanes.

La dalca

Uno de los aspectos más distintivos es su habilidad para construir canoas con las que se movilizaban entre los canales del sur. Conocida como dalca, era similar a la que usaban los chumash en la actual California, Estados Unidos.

Según la descripción española, eran tres tablones de alerce o ciprés -que se angostaban por los extremos para hacer de popa y proa- cocidos con fibras vegetales de coligües. Podía medir hasta 11 metros de largo y trasladar hasta 25 personas.

Al centro de la embarcación ponían arena y sobre ella prendían fuego que nunca se apagaba y que servía para calefaccionar y cocinar los alimentos.

La destreza y tecnología que alcanzaron en la construcción de estas canoas puede ser producto de la propia evolución en la técnica o bien, a partir del contacto que tuvieron con otros pueblos canoeros. Para Aspillaga es difícil afirmar cuál es la teoría correcta.

Así se obtendrá el DNA

Para obtener el DNA mitocondrial, Mauricio Moraga usará una pequeña muestra de tejido óseo no mayor a una moneda de 10 pesos.

El trozo de hueso se disolverá en reactivos especiales y después de varios días de trabajo y complejos procedimientos de purificación se obtendrá una pequeña cantidad de DNA, principalmente mitocondrial.

Utilizando la técnica de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) se amplifican cientos de millones de veces pequeños fragmentos del DNA mitocondrial.

Estos fragmentos se secuencian y se comparan para ver las diferencias que presentan entre ellos y con los obtenidos de DNA de otras poblaciones originarias.

Fuente: Diario La Nación. 30 de Abril de 2010.

Derretimiento de hielos revela secretos del pasado en Canadá



Toronto.- Los hielos que se están derritiendo en el Artico canadiense revelan secretos del pasado, entre ellos sobre ciertos hábitos de cazadores de renos de los últimos milenios que pasaron de la utilización de lanzas a los arcos y flechas.

El arqueólogo canadiense Tom Andrews, que con sus colegas del Centro Prince of Wales Northern Heritage pudo recoger numerosos restos en la zona de las montañas Mackenzie, documentó de qué manera los cazadores se adaptaban a los cambios.

Removido el hielo estratificado y los excrementos de caribúes, los investigadores ahora pueden recuperar flechas que se remontan a 2.400 años atrás y arcos de 800 años de antigüedad.

"Los utensilios son realmente asombrosos", dijo Tom Andrews, del Prince of Wales Northern Heritage Centre en Yellowknife y principal investigador del International Polar Year Ice Patch Study.

"Hay flechas de madera y puntas de flecha tan finas que uno no puede creer que alguien se sentase con una piedra y las hiciese", dijo el investigador en un comunicado.

Los biólogos involucrados en el proyecto también están examinando el estiércol aparecido bajo el hielo, en busca de restos de plantas, partes de insectos, polen y parásitos de caribúes.

Andrews comenzó su búsqueda en 2000, revisando imágenes de satélite de las montañas Mackenzie para localizar y examinar los parches de hielo después de que se descubriera una punta de flecha de 4300 años de antigüedad en la zona tres años antes.

"Nos damos cuenta de que los parches de hielo se siguen derritiendo y tenemos una obligación ética de reunir esos utensilios conforme van siendo expuestos", dijo.

"En un año o dos los artefactos habrían desaparecido", añadió.

Fuente: ANSA/AFP y Diario La Segunda. 27 de Abril de 2010.

martes, 6 de abril de 2010

El cementerio más antiguo de Chile (III)

Los vestigios de Tutuquén.


Lugar ceremonial tiene más de 10 mil años de antigüedad, según estudio de laboratorio estadounidense, y para cautelar dicho patrimonio, las autoridades estudian levantar un museo.

Tras conocer los resultados de un estudio encargado a expertos internacionales, el Gobierno Regional del Maule entregó su respaldo para la construcción del denominado “Museo de los Orígenes”, que será emplazado en el mismo sitio en que está el cementerio indígena descubierto hace dos años en la localidad de Tutuquén.

El sitio arqueológico es el cementerio más antiguo existente en el país, con una data estimada por el Laboratorio Beta Analytic de Estados Unidos en 10 mil 570 años, según dio a conocer el Consejo de Monumentos Nacionales del Maule al intendente del Maule, Alexis Sepúlveda Soto, y a la Gobernadora de Curicó, Gloria Rojas, durante la presentación de los resultados preliminares de la investigación a los restos humanos y culturales hallados al poniente de la ciudad de Curicó.

El arqueólogo y coordinador del organismo estatal, Nelson Gaete, destacó que el sitio es un espacio religioso y ceremonial usado por los primeros habitantes de la actual Región del Maule y, por tanto, debe ser mantenido y puesto en relieve ante la comunidad.

“El cementerio tiene que ser un memorial, un sitio que nos permita vincularnos con nuestros orígenes, con estos pueblos originaros en que parte de su sangre está en nuestra sangre”, subrayó el profesional.

“Sería un tremendo error para la región no cautelar el espacio físico en que hemos encontrado estos restos. Es un proyecto interesante y hermoso para la región que va a permitir cautelar nuestro patrimonio y nuestros orígenes para el conocimiento de las futuras generaciones”, puntualizó el intendente Sepúlveda mientras observaba los restos óseos.

Por su parte, la gobernadora Rojas manifestó que la decisión de construir un museo en el sitio del hallazgo “es un momento histórico” para los curicanos en particular y maulinos en general.

El proyecto

El diseño de la infraestructura costará unos 52 millones de pesos que serán financiados con recursos 2008 del Fondo de Desarrollo Regional. La construcción de unos 2 mil metros cuadrados se estaría iniciando el 2009.

Un lugar destacado tendrá una cripta a la vista del público, en el que serán preservados los restos humanos actualmente en investigación en el laboratorio que el Consejo de Monumentos Nacionales posee en la ciudad de Talca.

El edificio permitirá, además, conocer los estilos de vida de los antiguos habitantes maulinos de la costa, valle central y precordillera, gracias a que el museo recibirá todos los hallazgos arqueológicos existentes en la zona.

En el sitio arqueológico de Tutuquén los investigadores detectaron la ocupación de dos tipos de poblaciones, diferenciadas por la estructura ósea de los 42 restos levantados y los materiales culturales que los acompañaban en sus tumbas.

Los más antiguos corresponden al período arcaico-temprano, eran cazadores-recolectores, poseen el cráneo alargado (dolicocéfalo) y estaban acompañados por puntas de proyectiles. Se estima que vivieron en el lugar entre 5000 y 9000 años antes del presente.

Los más actuales corresponden al período alfarero-temprano, eran agricultores con el cráneo redondeado y sus tumbas contenían vasijas de arcilla. Se estima que este grupo vivió hace unos 2500 y 1000 años antes del presente.

Fuente: Diario La Nación. 18 de Diciembre de 2007.

El cementerio más antiguo de Chile (II)

Los trabajos de excavación en la zona.


Hace dos años la ampliación del retén de la zona de Tutuquén develaría uno de los hallazgos más importantes y significativos del último tiempo en la región. Se trata de un cementerio indígena, en el cual se encontraron los restos óseos de tres poblaciones diferentes de seres humanos, los primeros maulinos en habitar la zona.

Tras cumplir la primera etapa desde el descubrimiento, que contempló la excavación arqueológica del lugar y la evaluación del estado de conservación del sitio, todo el material arqueológico recolectado, correspondiente a los cuerpos de estos antiguos productores, recolectores y cazadores, fue enviado al laboratorio Beta analytic radiocarbon dating laboratory en Miami, EE.UU. para, de esta manera, determinar cuántos años estuvieron cubiertos por la tierra y el tiempo.

Cementerio más antiguo de Chile

El informe final de estos análisis fue dado a conocer el pasado martes 19 de diciembre, en una conferencia de prensa que reunió al intendente Alexis Sepúlveda, a la gobernadora de Curicó, Gloria Rojas y al coordinador regional del Consejo de monumentos nacionales, Nelson Gaete.

El resultado da por conclusión que los restos óseos encontrados en el sitio arqueológico de Tutuquén tienen una data de 10570 años, lo cual convierte a este lugar en uno de los cementerios arqueológicos y asentamiento humano más antiguos del territorio nacional. “La importancia que posee este yacimiento arqueológico es documentar en forma segura que el territorio regional se encontraba ocupado por población humana hace más de 10000, lo que la hace la más antigua de la región del Maule y, obviamente, uno de los sitios más antiguos del territorio nacional (…) Estamos frente a los restos de los primeros maulinos, una historia que obviamente no empieza en 1532, sino que bastante antes”, señaló Nelson Gaete, agregando que hoy en día no existen más de 10 sitios correspondientes al arcaico temprano, encontrados en el país.

El hallazgo de conchas, huesos de roedores y otros elementos junto a los cuerpos, permite concluir que esta población recorrió amplios territorios de la región, llegando hasta el litoral.

Museo de los orígenes

El intendente Alexis Sepúlveda señaló en la conferencia que el Gobierno Regional se encuentra estrechamente vinculado a este proyecto desde sus orígenes, cuando a través de la construcción del Retén los huesos de nuestros antepasados salieron a la luz, hasta su rescate, el cual fue posible gracias a los 30 millones de pesos aportados por Cultura, lo cual corresponde a un 2% de su presupuesto.

“Hace tres o cuatro meses que nos encontramos trabajando con gente vinculada al tema patrimonial en la necesidad de contar con un museo que recoja nuestro patrimonio en torno a nuestros orígenes, nuestra historia, etc. y ahora nos encontramos en la etapa de elaboración de la ficha para la construcción y equipamiento del Museo de los orígenes, que se va a instalar en esta misma localidad y va a mantener este cementerio in situ y además va a tener infraestructura que nos permitirá exponer esta parte de nuestra historia”, dijo la primera autoridad del Maule, quién además añadió que el diseño, equipamiento y construcción del museo será financiado con fondos 2008, con una inversión de 52 mil 700 millones de pesos, lo cual tiene una gran significación a nivel histórico y turístico para la provincia de Curicó.

Por su parte, la gobernadora de Curicó, Gloria Rojas, aseguró sentirse muy orgullosa de que Curicó sea cuna de los orígenes de nuestra zona: “Para mí es un momento histórico impresionante”.

Fuente: Diario El Maule. 20 de Diciembre de 2007.

El cementerio más antiguo de Chile (I)

Los vestigios de Tutuquén.


Un sorprendente hallazgo de un cementerio indígena que data de hace nueve mil años realizó un grupo de expertos en la zona norte de la Región del Maule.

Se trata de osamentas de hombres, mujeres y niños que se encuentran en muy buen estado de conservación, constituyéndose en el hallazgo arqueológico más importante de la zona centro-sur del país.

El buen estado de los restos se explicaría por la abundante presencia de cenizas, las que habrían formado parte de un antiguo rito mortuorio.

Junto a las osamentas se hallaron jarrones que conservan intacto su color, productos del mar como ostiones y collares. El arqueólogo a cargo de los trabajos de excavación, Nelson Gaete, explicó que se encontraron dos grupos humanos distintos. “Un primer grupo que ocupa el sitio para inhumar a sus muertos alrededor de siete mil a nueve mil años de antigüedad, que son poblaciones de cazadores arcaicos, y una segunda ocupación, miles de años después, de poblaciones alfareras, más o menos entre el 400 y el 800 después de Cristo”, dijo.

Sobre las características morfológicas, el arqueólogo Mario Enríquez explicó que “unos tienen un cráneo alargado que llamamos dolicocéfalos u dolicoides que son característicos de las poblaciones arcaicas de siete mil, nueve mil años atrás”. Agregó que también hay “cráneos más redondeados, braquicéfalos, que son característicos de las poblaciones alfareras y poblaciones modernas como nosotros”.

Según el experto, estas dos agrupaciones humanas representan las dos oleadas migratorias que poblaron la zona central del país.

Estos primeros maulinos serán llevados ahora a peritajes de laboratorio, junto a otros restos hallados en el sector llamado Tutuquén, sitio donde se construye un cuartel de Carabineros.

Sin embargo, ya no hay recursos para seguir con los trabajos, por lo que el equipo de arqueólogos teme que se pierda para siempre un importante hallazgo como este.

Fuente: Radio Universidad de Chile. 15 de Noviembre de 2005.